Los carbohidratos son uno de los nutrientes más importantes y necesarios en la dieta de un deportista.
Los carbohidratos son vitales para ayudar a alcanzar el máximo rendimiento durante la actividad física porque proporcionan:
Energía: los carbohidratos son la principal fuente de energía para que nuestros cerebros y cuerpos funcionen adecuadamente. Cuando se comen carbohidratos, eventualmente se digieren y descomponen en azúcares más pequeños, concretamente en glucosa. Esta glucosase almacena en el hígado y los músculos para ser utilizada como combustible, especialmente durante actividad física. Los carbohidratos mejoran el rendimiento deportivo al retrasar la fatiga y permitiendo que un deportista compita en niveles más altos durante más tiempo.
Ganancia muscular: sin una cantidad adecuada de glucosa almacenada en el cuerpo, otros nutrientes, como las grasas o las proteínas musculares, se utilizan para producir energía. Con la correcta cantidad de carbohidratos disponibles para los músculos, las proteínas se encargarán de reparar y reconstruir el tejido muscular, lo que maximiza la ganancia muscular.
Cómo funcionan los carbohidratos para ayudar a rendir al máximo:
A medida que aumenta el ejercicio, el glucógeno muscular (donde almacenamos los carbohidratos) se agota, lo que provoca una mayor necesidad de carbohidratos. Los niños y adolescentes deportistas, es muy importante que coman carbohidratos antes, durante y después de un evento. A menudo se engaña a los adolescentes para que piensen en alimentos bajos en carbohidratos y las dietas ricas en proteínas les ayudarán a ganar masa muscular pero esto no es verdad. Una dieta baja en carbohidratos no solo disminuirá el potencial muscular; eso también empeorará el rendimiento deportivo en general.
Los alimentos que contienen una fuente importante de carbohidratos incluyen:
- Granos: Los cereales integrales son los mejores, como las tortillas de maíz, la pasta de trigo integral y el trigo integral. El pan de espelta, la quinua, el arroz integral, avena integral o cereales 100% integral
- Frutas frescas, congeladas o enlatadas en su propio jugo.
- Leche y yogur, si es posible bajo en grasa u orgánico.
- Las verduras tienen una pequeña cantidad de carbohidratos.