Cómo cada verano, La Molina es una parada ineludible para disfrutar de su Bike Park y sus actividades varias, pero hoy el protagonista será su oferta para los amantes del descenso en Bicicleta.
Un servidor y nuestro becario fuimos el pasado viernes a la estación de La Cerdanya preparados para disfrutar de sus pistas de descenso, que tienen cómo peculiaridad mucho desnivel y largos recorridos.
Debido a las copiosas lluvias de las jornadas precedentes, el estado de algunos tramos de los circuitos no era el mejor, ya que había charcos, mucho barro y en muchas zonas, el agua se había llevado la tierra y dejado multitud de piedras, pero la acción de la Naturaleza en este caso, lo que hace es aumentar la dificultad, sin restar un ápice de diversión.
Por varios motivos decidimos disfrutar con las pistas más largas, ya que tras una bajada por la pistas Allforone, vimos que la zona de La Tossa d’Alp estaría en mejores condiciones, ya que tiene más horas de sol y sus zonas entre bosque son menos verticales.
Nuestra pista favorita del Bike Park es la Guineu, una bonita y larga pista que nos lleva desde la llegada del Telecabina de Alp 2.500 hasta la base del mismo telecabina, pasando por la estación vecina de Masella con un trazado de más de 6 kilómetros y más de 600 metros de desnivel negativo.
Coll de Pal es otra pista que nos encanta, con vistas de vértigo de la estación y de la Collada de Toses, también muy larga, 5,5 kilómetros y el mismo desnivel que la Guineu (empieza y acaba en el mismo sitio) pero con algo más de dificultad en su zona media.
Las dos pistas rojas, Senglar y Marmota estaban en unas condiciones algo delicadas, con mucha piedra suelta, reguerotes causados por el agua y algo de barro, que hicieron que las bajáramos una sola vez.
Las dos negras (trencapinyes y Tallafocs), para las que no tenemos nivel suficiente lucían una imagen bestial, perfecta para aquellos enemigos del miedo.
La zona baja dispone de dos trazados, uno más sencillo, el Woodpark, con varios módulos sencillos de madera y la Jump Zone, con varios saltos y zonas de dubbies, dónde el becario siempre disfruta cada vez que venimos.
Valoración Final
El Bike Park de la Molina tiene varios puntos fuertes, uno, su proximidad a Barcelona, el segundo que normalmente no hay mucha gente, el tercero las pistas largas y por último una oferta complementaria para que si hay alguien que no quiera hacer descenso, suba en Poney, alquile una bici eléctrica, se tire en tirolina o se broncee en la piscina.
Hay un par de tiendas que alquilan bicis de descenso, la de la misma estación y el Cérvol Blanc, en Font Canaleta, dónde también podremos alquilar bicis eléctricas o Mountain Bikes a un precio más competitivo.