Morcillo y Días también se hacen con la etapa de hoy y quedan a cuatro minutos de subir a lo más alto del cajón en la general La edición más dura de la historia ha contado con una participación excepcional: profesionales y amateurs han vivido el mountain bike en estado puro Ibiza, 31 de marzo 2024.
Hoy ha concluido la XXIII Vuelta Ibiza Scott by Shimano donde la victoria de esta edición se la han llevado la pareja compuesta por Dario Cherchi y Leonardo Páez (Soudal Leecougan) y la dupla compuesta por Rosa Van Doorn y Janina Wüst (Buff Megamo). Cherchi se sentía especialmente contento por haber podido compartir esta prueba por parejas con el doble campeón del mundo de XC Maratón, Leonardo Páez. Leonardo detallaba las características del recorrido de hoy: “Ha sido una etapa muy técnica y explosiva que no conocíamos. Ha tenido bastantes tramos técnicos como la bajada de Sa Talaia y especialmente los tramos de rocas de la costa”. En Cala Comte, el santaeulaliense, Enrique Morcillo y su compañero, el portugués Jose Dias (Buff Megamo), apretaban para hacerse con la victoria de la última etapa, quedando segundos en la general a cuatro minutos de los campeones. En categoría femenina, las ciclistas del Buff Megamo no daban tregua y repetían victoria en una etapa que para ellas ha sido espectacular: “Nos ha encantado la etapa de hoy que ha sido súper rápida, aunque no hemos salido líderes, una vez hemos empezado el tramo de costa, hemos aprovechado para ponernos en cabeza y aguantar hasta el final”, explicaban las campeonas.
El pelotón accedía al arco de salida con los ánimos arriba ante las dos jornadas vividas y la que aún tenían por delante: 59 km y 1.400 metros de desnivel con el extra de viento que ha puesto en apuros a los corredores en los tramos que bordeaban la costa. El primer gran repecho, como ocurrió en la etapa de ayer, ha sido clave para marcar el ritmo en la etapa de hoy. La subida a Los dos Monos en el km 5 y después, la subida al Alto de Sa Talaia en el km 20, han sido la gran prueba de fuego. A continuación, venía un descenso técnico. A partir de aquí, terminaba parte del sufrimiento para dar paso a los tramos de roca, la parte más técnica de la etapa de hoy y como recompensa: la espectacularidad de Ibiza ante ellos. Cala Carbó, Cala Molí, Cala Codolar y el segundo avituallamiento. Quedaban 10 km para la llegada a meta pero antes se ofrecía a los participantes el paso por un verdadero oasis: el sabinar, la fina arena dorada y el azul único de Cala Bassa.
